Reportaje Vocento
Hace algo menos de cinco años los enfermos de hepatitis C se amotinaron contra las autoridades sanitarias. Después de décadas de tratamientos dolorosos y en muchos casos ineficaces, por fin se disponía de un medicamento, el Sovaldi (nombre comercial del sofosbuvir), que lograba unas tasas de curación del 95%. Lo malo es que el laboratorio propietario de la patente, Gilead, lo vendía a un precio exorbitante, hasta el punto de que un tratamiento de doce semanas rondaba los 54.000 euros.